La elección del terreno es el primer paso y uno de los más importantes en cualquier proyecto de construcción industrial. Un terreno mal ubicado, con problemas de acceso o sin las condiciones adecuadas, puede encarecer el proyecto, afectar los tiempos de entrega e incluso limitar el crecimiento futuro de la empresa.
En Forma Industrial, con años de experiencia en la construcción de naves y parques industriales en México, sabemos que una buena decisión desde el inicio marca la diferencia. Aquí te compartimos los principales factores que debes considerar para elegir el terreno ideal.
- Ubicación estratégica
Uno de los aspectos más relevantes es la cercanía a vías de comunicación clave: carreteras, autopistas, aeropuertos, ferrocarriles o puertos. Esto garantiza una mejor logística de entrada y salida de materiales o productos.
También considera:
- Proximidad a proveedores y clientes.
- Zonas industriales consolidadas.
- Posibilidades de conexión a parques industriales existentes
- Disponibilidad de servicios básicos
Verifica que el terreno cuente con acceso o factibilidad para servicios como:
- Energía eléctrica (baja y media tensión).
- Agua potable o uso industrial.
- Drenaje y saneamiento.
- Internet y telecomunicaciones.
La falta de estos servicios puede representar un alto costo adicional o incluso imposibilitar la construcción en ciertos casos.
- Características del suelo
Antes de adquirir un terreno, es indispensable realizar un estudio de mecánica de suelos para conocer:
- Capacidad de carga del terreno.
- Nivel freático (presencia de agua subterránea).
- Tipo de suelo (arcilla, roca, arena, etc.).
Un mal análisis puede derivar en fundaciones más costosas o en problemas estructurales a futuro.
- Superficie y forma del terreno
La forma del terreno debe permitir el aprovechamiento eficiente del espacio para la nave industrial y sus áreas complementarias (estacionamientos, patios de maniobra, oficinas, etc.).
Considera:
- Que sea un terreno regular (forma rectangular).
- Que tenga el tamaño suficiente para las necesidades presentes y futuras.
- Que cumpla con las restricciones del uso de suelo de la zona.
- Uso de suelo y normativa local
Antes de iniciar cualquier obra, asegúrate de que el terreno esté legalmente autorizado para uso industrial y que se pueda construir el tipo de nave que necesitas.
Consulta:
- Planes de desarrollo urbano.
- Regulaciones ambientales locales.
- Restricciones por altura, densidad o impacto vial.
- Potencial de crecimiento y plusvalía
Piensa en el futuro de tu empresa. Un terreno que permita ampliaciones o nuevas construcciones será una mejor inversión a largo plazo. Además, si el terreno se encuentra en una zona en desarrollo, la plusvalía puede generar beneficios adicionales.
Elegir el terreno correcto no es solo una cuestión de ubicación, sino de estrategia, visión y conocimiento técnico. En Forma Industrial, podemos ayudarte desde la selección del terreno hasta la entrega de tu nave industrial llave en mano.